Rusia ha importado un 97% menos de granel desde la entrada en vigor, en junio de 2020, de la polémica Ley del Vino
La nueva Ley del Vino de la Federación Rusa, que restringe la importación de graneles extranjeros para favorecer la producción local – insuficiente, según los operadores, para cubrir el consumo nacional –, entró en vigor a mediados de junio de 2020. Desde entonces, Rusia ha reducido un 96,8% el volumen importado de vino a granel. No obstante, la primera mitad de año ya fue pésima (-56,3%).
España perdió casi la mitad del volumen exportado a Rusia, pero solo un 7,8% de su facturación
España perdió en 2020 el 46% de su volumen global de vino exportado a Rusia al ser el primer proveedor de granel en este mercado, si bien solo facturó un 7,8% menos que en 2019, al crecer a muy buen ritmo el valor de las ventas de envasados, espumosos y bag-in-box, vinos de mayor precio. De hecho, España pasa de cuarto a segundo vendedor de vino envasado en valor, superando a Francia y a Georgia.
Rusia gastó más que nunca en vino en 2020
Rusia importó un 21% menos de vino en el año 2020, hasta los 354 millones de litros, aunque gastó un 6,8% más hasta alcanzar un récord histórico de 79.933 millones de rublos (unos 867 millones €), al dispararse el precio medio un 35%, tanto por la mejor evolución de los vinos con mayor valor añadido, como por fuertes subidas de precio en todas las categorías.