Según los datos de la OIV, la previsión inicial se sitúa en una estimación media de 232 millones de hectolitros (+3% respecto a la cosecha históricamente baja de 2024).
La Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) publicó el 12 de noviembre de 2025 sus primeras estimaciones anuales sobre la producción mundial de vino para el año 2025.
Según los datos difundidos por la OIV, la previsión inicial se sitúa entre 228 y 235 millones de hectolitros, con una estimación media de 232 millones de hectolitros. Esta cifra representa un incremento del 3 % respecto a la cosecha históricamente baja de 2024, aunque todavía se mantiene un 7 % por debajo de la media de los últimos cinco años.
Italia consolida su posición como primer productor mundial de vino en 2025, con 47,3 millones de hectolitros (+8 %), por delante de Francia, con 35,9 millones de hectolitros (-16 %), y España, con 29,4 millones de hectolitros (-6 %). Estados Unidos se mantiene en el cuarto puesto, mientras que Australia, tras recuperarse de la reducida cosecha de 2024, vuelve a ocupar el quinto lugar a nivel mundial, por delante de Argentina, que conserva su posición como principal productor de América del Sur.
A pesar de las diferencias regionales, este moderado crecimiento de la producción mundial, tras un año de cosecha particularmente baja, podría favorecer un equilibrio general del mercado. Se espera que las existencias se mantengan estables en un contexto de debilitamiento de la demanda y persistentes incertidumbres comerciales.
